Al escribir mi nombre entrecomillado en el buscador me devuelve unos 45.400 resultados en 0,29 segundos. La práctica totalidad de resultados son enlaces a artículos publicados en la revista Comunicar o el diario Ideal. También algunas son citas a los blogs que he puesto en marcha como el del Colegio Nazaríes de Armilla. Al ampliar la búsqueda y escribir sólo mi nombre y primer apellido la cosa cambia bastante. Pues aparecen multitud de personas que se llama como yo, desde el guitarrista de Camarón hasta el presidente de Perú.
Hasta el último resultado de la página 7 todos están relacionados con
colaboraciones personales. En esta página se refiere a un tal Antonio Arenas
Merino para continuarse de nuevo con enlaces referidos a mi trabajo como
docente o colaborador en prensa. En los resultados no aparece nadie con mi
mismo nombre completo. El contenido de
los nombres largo y corto, al menos los que he podido ver en una rápida
lectura, son reseñas biografías de la Wikipedia o perfiles de Redes sociales, sobre
todo de Facebook.
Al pinchar en imagen la mayoría corresponden a otras personas, junto con dos
caricaturas mías que he utilizado en los perfiles de bloguero y alguna foto.
También una foto con unos alumnos de un centro bilingüe de Isparta (Turquía)
que visité en 2007. Al buscar en Vídeos no aparezco ninguno relacionado conmigo, aunque he
publicado algunos en Youtube de actividades realizadas con mis alumnos de
Armilla (Granada). En enlace de Noticias
aparecen las relacionadas con otros Antonio Arenas, tales como un periodista de
Marca, un exciclista o un concejal.
En los enlaces reconocidos y/o visitados no he encontrado referencia
negativa alguna, pues las concernientes a mi persona sólo enlace con trabajos
publicados relacionados con mi profesión. Tampoco he detectado uso rechazable
en lo que concierne a las imágenes.
He comprobado que en los buscadores de personas como namechk tanto mi nombre completo como mi nick están ocupados
en las principales redes sociales, blogs, servicios de alojamiento de
fotografía, etc. Para whozat y wink no existo y para
spezify, que no conocía, me ha devuelto alguna que otra fotografía que he
realizado para ilustrar mis colaboraciones.
Por los resultados obtenidos mi conclusión es que mi huella digital es bastante positiva, por lo que me siento satisfecho y no veo la necesidad de reconstruir mi identidad digital.